Para cumplir con la normativa europea anticontaminación, muchos vehículos diésel de última generación están equipados con un filtro para la reducción de partículas de los gases de escape. Los filtros de partículas requieren una regeneración periódica, generalmente gestionada y programada por la unidad de control del motor durante el uso normal del vehículo.
En condiciones de conducción particulares o si el vehículo circula principalmente por vías urbanas, la regeneración espontánea no es posible, por lo que debe realizarse la regeneración forzada del filtro. Gracias a esta aplicación, esta operación se puede realizar de forma rápida y segura.